Surgen las dudas en torno a CENAFE Esports, un proyecto con decenas de patentes discutibles y testimonios comprometedores
El Centro Nacional de Formación de Entrenadores (CENAFE) es una de las organizaciones que ofrece titulaciones para técnicos deportivos, especialmente de fútbol. Desde hace menos de un año, anunció su entrada en los videojuegos competitivos con CENAFE Esports. Hoy es noticia al producirse un testimonio de un ex trabajador del centro en el cual realiza duras acusaciones tanto a la organización en general como a Miguel Ángel Galán, su presidente.
Ayer al filo de las 8 de la tarde, se propagó un hilo realizado por Rubén Domínguez (@R_Electriko), técnico de la sección de Fortnite de eMonkeyz. En dicha cadena de mensajes, relata cómo entró a colaborar con CENAFE mediante el propio Galán, las intenciones poco realistas de un proyecto sin apenas medios y las más de 70 marcas registradas a su nombre entre las que está una "Federación de E-sports" por cada comunidad autónoma.
Sí, existe otra Superliga Orange
Rubén detalla al inicio que fue el propio Miguel Ángel Galán quien le contactó por mensaje privado. En la conversación, Galán afirma haber leído un artículo del propio Rubén sobre cómo crear un club de esports y le ofrece concertar una reunión, ya que él está interesado en entrar en el mundo de los deportes electrónicos. En dicha reunión, varios asistentes convencieron a Rubén de que les asesorara a la hora de fundar un equipo, aunque este no estaba del todo seguro por lo compleja que es dicha tarea.
"La primera idea de Galán era crear un club de esports. Pero un club sin inversión, sin plan de negocio, sin plan de márketing, sin inversión en redes, sin personal, sin nada.", cuenta un Rubén que afirma haber desaconsejado todas y cada una de estas decisiones, pero que aguantó en el proyecto hasta que se hartó del uso de las redes sociales por parte de Galán, en muchos casos sin coordinarse con el equipo a cargo de dicho área.
Estas son algunas de las marcas registradas por Miguel Ángel Galán, presidente de CENAFE.
El último bloque del hilo se centra en el propio Galán, el cuál tilda de ególatra y del que desvela varias de esas marcas registradas, entre la que está "SLO superliga orange", competición propiedad de la Liga de Videojuegos Profesional. Gracias a la base de datos de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual es posible revisar todas y cada una de estos registros a nombre de Miguel Ángel Galán Castellanos, incluidos los de los organizaciones como la International Esports Federation (IeSF), que tiene su sede en Corea del Sur.
Miguel Galán, en respuesta a un meme sobre esta SLO paralela, rechaza el que haya registrado estas marcas para sacar dinero y afirma que su intención en todo momento ha sido la de "colaborar en la regulación" del sector de los esports. Rubén, que revela haber sido amenazado con ser llevado a juicio por hablar de Miguel Galán cierra su cadena de mensajes desaconsejando el Curso de Entrenador Básico de E-Sports Nivel 1 que oferta CENAFE.
— Fernando Cardenete (@fercardenete) 21 de abril de 2019
"El curso es dentro de dos meses, no hay temario (porque me negué a escribirlo), no hay profesores, no hay márketing, no hay conocimiento alguno sobre esports y el supuesto abal que tiene el curso es de una de las entidades inventadas y registradas por Galán que comentaba antes", afirma un Rubén Domínguez que dice haber cobrado siempre en negro y deja pruebas de su implicación con CENAFE durante estos últimos meses. Cabe destacar que este curso está avalado por la 'Federación Madrileña de E-Sports', una de las marcas registradas por el propio Miguel Galán.
Este es el Plan Formativo del Curso de Entrenador Basico de E-Sports de CENAFE.
CenafeEscuelas, la cuenta en Twitter del Centro desmintió los datos aportados por Rubén sobre el curso de entrenadores: "El curso es en septiembre y el director Daniel de Ignacio está con el profesorado y los temarios". Todo podría quedarse ahí, pero apareció el propio Daniel de Ignacio para confirmar el testimonio de su compañero y comunicar que tanto él como su equipo se desligan completamente del proyecto.
