En ciencias políticas se denomina gatopardista al político que realiza una transformación revolucionaria, pero que en la práctica sólo altera la parte superficial de las instituciones. Este "cambiar todo para no cambiar nada" que se popularizó a raíz de la novela de mediados del siglo XX de Giuseppe Tomasi di Lampedusa 'El gatopardo', parece estar describiendo a la perfección lo que ha pasado con la llegada de la nueva League of Legends European Championship, y más en concreto de Rogue, el equipo de Steve Aoki e Imagine Dragons.
Y es que son varias fuentes las que hablan de que este nuevo equipo saldrá a competir el día uno de LEC con Kim "Profit" Jun-hyung, Mateusz "Kikis" Szkudlarek, Chres "Sencux" Laursen, Kim "Wadid" Bae-in y Martin "HeaQ" Kordmaa como quinteto titular, además de Simon "fredy122" Payne como entrenador y Tomislav "flyy" Mihailov como mánager. De estos siete nombres, cuatro estuvieron durante la pasada temporada dentro de ROCCAT, número que sube hasta seis si contamos etapas pasadas, siendo Sencux es el único que no ha militado en el equipo polaco.
Esperando a Larssen
We are happy to announce @RGEfredy122 as our new #LEC Head Coach! Together with Edward, we are confident that this is the foundation for a successful season. #GoingFullEU
— Rogue (@GoingRogueGG) November 27, 2018
Read more » https://t.co/8zls3Jyghw pic.twitter.com/lEFTZk0mnr
Llama la atención que este cambio tan grande que parece suponer la League of Legends European Championship respecto a la LCS de toda la vida, haga que prácticamente tengamos a un ROCCAT con un nuevo sobrenombre y dueños, siendo además uno de los equipos menos exitosos deportivamente de los últimos tiempos. Es cierto que Wadid es un jugador notable, al igual que Profit y Kikis, pero en vista de los Gorilla y demás fichajes de la parte alta de la tabla, parecen las sobras de los grandes.
En un artículo publicado en el día de ayer, reflexionamos sobre el cambio que había supuesto el adiós al descenso deportivo en la nueva competición de Riot Europa, y como podría obligar a que muera la clase media de la competición. La solvencia de jugadores expertos podría estar cotizando a la baja, en favor de la búsqueda de diamantes con los cuales armar un proyecto ganador a medio-largo plazo.
Rogue es un buen ejemplo de esta teoría, ya que se dice que esperará a que Larssen, uno de los midlaners con mayor proyección de la región, termine sus estudios para incorporarle al equipo de manera definitiva. Todo un trotamundos como Sencux, quien no acaba de dar muestras de calidad suficientes para sus tres años en la máxima competición continental, calentará su silla hasta la temporada veraniega.
Cambia el estudio, cambian los grafismos, cambia el nombre de la competición, pero al final volvemos a tener a ROCCAT dentro. Con un nuevo logo y nuevos dueños, pero casi los mismos jugadores y el mismo cuerpo técnico. "Cambiar todo para que no cambie nada", ya lo decía 'El gatopardo'.
Foto cortesía de @Shakarez
