Quedan unas horas para que llegue a nuestras pantallas la nueva expansión de Hearthstone: Kobolds y Catacumbas. Ya conocemos las 135 cartas que pueden aparecer en los sobres del set y os hemos hablado de las ocho que más nos gustan. Ahora es el turno de comentar esas que no queremos ver ni en pintura, y mucho menos saliendo de los sobres que nos hemos comprado con toda la ilusión del mundo y quizás algo de dinero.
Rey Togafloja
Empezamos fuerte. El "Rey Togafloja" es lo que toda la comunidad de Hearthstone ha venido a llamar "la carta meme". Ya hemos comentado en múltiples ocasiones en Xataka Esports que la regla para saber si una carta está balanceada es que el total de sus puntos de vida y ataque debe ser el doble más uno de su coste. Si aplicamos esto al Rey Kobold, tenemos un naipe 7 puntos inferior a lo que sería natural a cambio de un efecto que puede ser negativo.
Ese efecto es intercambiar nuestro mazo con el del oponente, quien recibirá una carta más que es un hechizo para volver a intercambiarlos. Seguid nuestro consejo y si os toca en lo sobres, enhorabuena por ese polvo arcano.
Temporus
Si antes le dábamos nuestro mazo al oponente, ahora es el momento de concederles dos turnos para perder antes. Ahora en serio, "Temporus" ni tiene buenas estadísticas y su efecto es más que malo, aún si fuera darnos dos turnos a nosotros primero, seguiría siendo discutible. Lo único destacable es que se trata de un Dragón y el Sacerdote podría llegar a tener un arquetipo basado en estas criaturas mitológicas.
Su efecto no llega a ser algo tan visual que pueda alcanzar el nivel de meme del "Rey Togafloja", pero si es este tipo de cosas que podemos catalogar como efectos de relleno, a falta de descubrir si logra casar con un arquetipo o combo concreto de cartas.
Lanzarruna
Lo siento, esto es un churro importante. Estamos hablando de un arma 3/3 por 8 cristales de maná que nos permite usar tres hechizos de una clase que no suele tener gran peso en este tipo de naipes y sí de los esbirros. Si estuviéramos hablando del mago, aún tendría un pase, pero el Chamán no puede sacar tanto rédito a este arma legendaria.
Un octavo turno gastado en equipar un arma que aportará 9 puntos de daño y tres hechizos divididos en tres turnos es una de las peores cosas que he visto en Hearthstone y esta clase tiene mejores opciones. Enhorabuena por el polvo arcano, porque "Lanzarruna" es un pseudónimo.
