Algunos podrían decir: “Yo juego a los dos sin problemas y de la misma forma”. Bueno, querido lector, si te sientes identificado con esa frase, ¡enhorabuena por ser una excepción! Pero... ¿De verdad juegas de la misma manera a League of Legends y a Dota 2? Igual eso explica la última racha de derrotas, ¿no crees?
Antes de avanzar y profundizar más en el tema, si eres de esos jugadores “ambidiestros”, aquí un resumen: no juegues igual a los dos juegos.
También habrá más de uno que diga que, al fin y al cabo, todos estos juegos son lo mismo. A grandes rasgos, sí, estás en lo cierto. Pero no del todo. Tanto League of Legends como Dota 2 pertenecen a un mismo género, el MOBA (Multiplayer Online Battle Arena). No obstante, es como decir que todo shooter es igual al anterior. Y eso, querido amigo, es la generalización más errónea que puedas llevar a cabo en el mundo de los videojuegos.
Todo queda en familia
Para entender el género MOBA y comprender por qué estos dos títulos son tan distintos, hay que remontarse al inicio del fenómeno. Como sabrás, el MOBA nació con Dota como padre de todo. Éste, a su vez, lo hizo a partir de Warcraft y Starcraft como un simple mod.
Finalmente, Dota acabó convirtiéndose en un juego independiente y con vida propia, lo que le llevó a una fase más allá: el desarrollo de una segunda parte, de un juego mejorado que no tuviese tan estrecha relación con las obras de Blizzard.
Dos hermanastros con muchas similitudes y bastantes diferencias
Durante dicho desarrollo, el equipo encargado del nuevo proyecto sufrió una división que llevó a la salida de algunos de sus miembros. Así, en octubre de 2009, sale a la luz League of Legends, resultado de esa parte del grupo que se marchó. Hablaremos primero de éste ya que, aunque no fue el sucesor directo, se adelantó a su hermanastro.
A continuación vamos a determinar los puntos fuertes de cada título, centrándonos en aquello que los diferencia.
Modos de juego: la variedad contra lo unidireccional
Aunque ambos títulos siguieron la estela del mapa original, cada uno ha tomado un camino diferente. Dota 2 ha escogido centrarse en un mapa único y, por tanto, en un único modo. Sólo tenemos diferentes opciones en la selección de personaje: elección libre, todos aleatorio, selección simple y selección aleatoria son los más populares.
En cambio, en League of Legends contamos con hasta tres mapas distintos, con sus propias reglas y estrategias a seguir. Además, cada fin de semana el juego incluye un modo eventual, que aporta un mayor dinamismo.
Los tres mapas básicos son:
- La Grieta del Invocador, para equipos de 5vs5 en tres calles separadas por la jungla. Mapa base que comparte con Dota, en mayor o menor medida.
- El Bosque Retorcido, para equipos de 3vs3 en dos calles y una pequeña jungla central, con dos altares.
- El Abismo de los Lamentos, también de 5vs5 pero en una sola calle.
Héroes pluriempleados y campeones especialistas
El MOBA de Valve tiene un total de 113 héroes, que se dividen en tres grupos: los de Fuerza, los de Agilidad y los de Inteligencia. Más allá de esta división, todos los personajes pueden desempeñar diferentes funciones, ya sea como Apoyo, Tanque, Presionador, o Tirador, entre otros.
Ésta es una de las cosas más positivas del juego, pues, si un héroe te gusta, puedes llegar a probarlo con distintos roles.
En Dota 2, un mismo héroe puede cubrir distintos roles
Una dificultad añadida, aunque, por suerte, no es común en todos ellos, es que hay héroes que utilizan más habilidades de lo “normal” en el género. Verás que hay personajes que necesitan hasta seis teclas para poder sacar todo su potencial.
Pero lo mejor de todo es que son completamente gratuitos y están disponibles desde el primer momento.
En la Liga de Leyendas sí nos toca pagar. Cada semana, podremos jugar a una serie de personajes gratuitos (de un total de 132, y subiendo), que irán rotando, pero si queremos tenerlos para nosotros tendremos que comprarlo. El dinero empleado para ello puede ser real (a modo de Riot Points) o virtual (Puntos de Influencia).
Los campeones de League of Legends no tienen tanta versatilidad como los de su hermanastro, si bien con los distintos modos podemos probar cosas nuevas. Por regla general, un personaje de Apoyo se mantendrá con este rol siempre, igual que lo hará un Tirador o un Tanque.
Hay que aclarar que desde el estudio de desarrollo muchas veces se ha modificado a un campeón para que pueda adaptarse a otras líneas. Lo mejor es que, dentro de un límite, pruebes a aquellos que te gusten con otros roles, siempre y cuando no fastidies a tus compañeros con una mala elección.
Dentro del juego: Fase de Líneas
Las fases de una partida están muy bien definidas en League of Legends. Hay dos etapas que separan el encuentro en early, generalmente hasta el minuto veinte; y late, la etapa avanzada donde la mayoría de los jugadores ya han comprado casi todos los objetos de su equipo.
Durante la primera parte se sucede la llamada fase de líneas, muy importante en este juego. En dicha fase, los campeones ocupan la calle que les corresponde con dos objetivos: el primero, conseguir dinero o farmear, acabando con los esbirros y campeones enemigos en una única calle. El segundo, mantener las torretas aliadas e intentar destruir la del rival.
En uno, la fase de líneas es muy importante; en el otro, inexistente
En Dota 2 no existe una fase de líneas, aunque el farmeo es igual de importante. Aquí llevaremos un ritmo mucho más dinámico, donde los héroes se moverán de línea en línea casi desde el primer minuto, buscando debilitar una de las calles o formar una distracción.
Este MOBA añade una mecánica exclusiva que sube un poco la dificultad: el denying o denegar. Haciendo clic sobre nuestros propios esbirros o torretas cuando están a un golpe de vida, los eliminamos nosotros mismos, evitando que el enemigo se lleve la recompensa de oro.
¿Qué objeto debería comprar?
En Dota 2, las habilidades de los héroes tienen un daño fijo. Es decir, por mucho que compremos objetos, éstos no fortalecerán nuestros hechizos, sino nuestro daño básico. Por lo general, en este MOBA, los ítems se escogen en función de su efecto, la vida o el maná que otorguen, y no por el daño que puedan añadir.
Por ejemplo, el Cetro de Aghanim fortalece la habilidad definitiva de muchos personajes, pero para otros no es más que un objeto que otorga más inteligencia. Hay que saber qué comprar y en qué momento.
En cambio, en League of Legends, los campeones podrán fortalecerse con la ayuda de los objetos, que les darán mayor Poder de Habilidad o Daño de Ataque. Esto no lo hace más fácil de dominar, ya que un mismo personaje puede hacerse más poderoso con diferentes objetos.
Generalmente, todo campeón de este MOBA tiene dos conjuntos de objetos bien definidos: uno más agresivo, para cuando vamos ganando la línea o la partida; y otro más defensivo para cuando las cosas no se nos están dando del todo bien.
El tiempo de juego y el perfil del jugador
Cuando estamos dentro de un mismo género, es complicado diferenciar perfiles de jugador. No obstante, entre estos hermanastros es mucho más sencillo, ya que cada uno cubre un tipo de necesidad en lo que a MOBA se refiere.
Si bien ambos títulos tienen un nivel profesional impresionante, para el jugador de “a pie” las cosas son bien distintas. Para poder definir dos perfiles diferentes, lo mejor es basarnos en la duración de las partidas.
En primer lugar, y ante la ya mencionada carencia de modos de juego, en Dota 2 las partidas suelen durar en torno a los 40 minutos. Esto puede hacerse pesado al principio, y elimina esta obra de nuestra lista de “Voy a echarme una partidita rápida”.
El modo clásico 5vs5 de League of Legends tiene una media de 25-30 minutos por partida. No obstante, cuando el encuentro está desequilibrado, el equipo que ve imposible una remontada puede optar por la retirada a partir del minuto veinte.
A esto hay que sumarle que tenemos diferentes modos, algunos más rápidos que otros. Así, el jugador del MOBA de Riot cuenta con opciones bien distintas según el tiempo del que disponga. O según lo que le apetezca hacer. Esto le proporciona una mayor versatilidad.
¿Qué ocurre si paso de League of Legends a Dota 2?
Cuando, dentro de un género, cambias de un juego a otro, hay mucho a tener en cuenta. Pongamos que eres un jugador de League of Legends que decide cambiarse a Dota 2. Te tocará aprender la mecánica de denegar. No sólo eso, te darás cuenta de que la jungla es completamente asimétrica y la estrategia a seguir en ésta es muy diferente.
Otro pequeño detalle que diferencia al MOBA de Valve del de Riot es que el primero guarda un secreto curioso en el río: Runas que potencian a nuestro personaje. Por otra parte, en League of Legends también tenemos algo en la misma zona del mapa: criaturas que pueden darnos visión de puntos estratégicos.
Pasar de League of Legends a Dota 2 es difícil. Se te pueden hacer bastante pesadas esas partidas de cuarenta minutos, y al principio te costará acostumbrarte a la técnica de denegar.
¿Y si paso de Dota 2 a League of Legends?
Lo cierto es que, en este caso, resulta mucho más sencillo adaptarse. Sin embargo, eso no quiere decir que uno sea más difícil que el otro, ya que cada juego tiene su secreto.
Quizás todo nos parezca mucho más fácil por la simple razón de que estamos ante partidas más rápidas y a que todos los personajes utilizan únicamente cuatro habilidades. Además, eso de que los objetos fortalezcan nuestros hechizos no lo hemos visto antes y es maravilloso, ¿verdad?
Conforme pase el tiempo y vayamos subiendo de nivel, nos daremos cuenta de que en las clasificatorias no todo es tan sencillo. Sí, habremos llegado hasta ahí sin mucha dificultad, pero a partir de nivel 30 empieza el juego de verdad.
¿Y no puedo jugar a los dos?
Por supuesto, nadie te lo impide.
Sólo tienes que tener en cuenta, tras lo que hemos visto, que no pueden jugarse siguiendo un mismo patrón. No sólo eso, sino que los jugadores de ambos títulos suelen ser muy diferentes porque buscan algo distinto.
Lo mejor es probar ambos y descubrir dónde encaja tu forma de jugar
Estaríamos hablando, de nuevo, de perfiles de jugadores. Un usuario del MOBA de Riot tiende a buscar partidas más casuales —incluso al jugar clasificatorias— por su rapidez y, sobre todo, por la posibilidad de rendirse al minuto veinte. Cuando uno acaba de llegar a la obra de Valve, las partidas pueden hacerse más pesadas.
En conclusión, y como todo en esta vida, debes ser tú quien elija. ¿Quieres seguir jugando a ambos? Adelante. Al menos, que estos consejos te ayuden a escoger el momento adecuado para cada uno.
El mejor consejo: Aprender de los mejores
La mejor forma de dominar ambos juegos es conociendo todos sus secretos: las técnicas adecuadas, el personaje perfecto para cada ocasión, la combinación de objetos… Claro que, a veces, creemos que sólo hay una posibilidad y necesitamos que nos abran los ojos. Para eso, nada como echar un vistazo a las ligas profesionales.
No se trata únicamente de ver cómo juegan en los niveles más altos, sino de qué equipo resulta el complemento perfecto. Y con equipo esta vez hablamos de ordenador y monitores. ¿Cuál será la mejor opción?
Una apuesta segura es Acer, proveedor oficial de monitores en el campeonato mundial de League of Legends. ¿Quieres sentirte como un profesional en la gran final? El Predator XB241H es una gran opción. Con una alta velocidad de actualización y una baja latencia (a lo que hay que sumarle NVIDIA G-SYNCTM), éste es el monitor oficial de los Worlds.
También cabe la posibilidad de que seas más de portátiles. En ese caso, Predator 15 puede ser tu aliado. Con un alto rendimiento, este portátil está preparado para largas e intensas sesiones de juego. Aunque el diseño es una maravilla, hay que destacar, por encima de todo, Cooler Master, que nos permitirá mantener el calor al mínimo. Con esto ya estarás preparado para jugar a lo grande.
